Fito Páez en La Plata: las canciones de nuestra vida

EL DÍA – Pedro Garay

Brillante sobre el mic, el artista rosarino ofreció su corazón y sus himnos a una multitud en el estadio de Estudiantes, en una velada nostálgica y feliz.

Hay canciones que trascienden. Que son el sonido de una época, que como una magdalena llevan con solo un acorde a un momento de la vida, y a la vez, escapan a su tiempo, sonando por años en las radios, de fondo en los cumpleaños, en cortinas televisivas, conocidas sin saber cómo por generaciones muy posteriores al año donde estos temas vieron la luz. «Las canciones en tu walkman». Himnos: nadie recuerda cuándo aprendió la letra del Himno nacional. Nadie recuerda tampoco cuándo aprendió, o cómo sabe, las estrofas de «El amor después del amor», la canción titular del disco más importante de Fito Páez. Y sin embargo anoche, abuelos, padres, hijos y nietos la cantaron a viva voz, en la apertura del primero de dos shows que el rosarino ofrece en UNO, el estadio de Estudiantes, para cerrar la gira por los 30 años del mítico trabajo.

Un show bien familiar, con jóvenes sub 30, gente de 40 (aquellos que vivieron el disco en su adolescencia) y sus padres, que también escucharon aquel álbum que estaba en todas las casas. de hecho, «El amor después del amor» es el disco más vendido del rock en español: un álbum que sacó a Páez de un círculo de oscuridad y autodestrucción, y que es además una celebración de su generación de artistas. Algunos ya no están con nosotros, lo que solo aumenta el factor emotivo del ritual: Páez ofreció su corazón al recordar a los suyos en la noche platense.

La carga emotiva también tiene que ver con que estamos, los platenses, ante una despedida: los dos shows en UNO, el de anoche, con entradas completamente agotadas y un campo desbordante, y el de esta noche, marcarán el cierre de la enorme gira que llevó a Páez por el mundo con esas canciones de esa época de su vida. Es la despedida final: Fito eligió La Plata para decirle adiós al disco que marcó su vida.